El panorama general de las finanzas públicas del país se desarrolla de manera compleja cada año, en gran parte debido a circunstancias externas que afectan el comportamiento económico, como la crisis desencadenada por la emergencia sanitaria y las continuas perturbaciones provocadas por el conflicto Rusia-Ucrania.
Desde la perspectiva del comportamiento en los ingresos totales de la Administración Central, de 2011 a 2021, el crecimiento promedio es de 9.1%, pasando de L 78,112 millones en 2011 a L 185, 826 millones en 2021. Este incremento se debe al crecimiento promedio del 8.8% de los ingresos corrientes, que fueron L 53,007 millones en 2011 y L 112,969 millones en 2021.
Durante el mismo periodo, el gasto total de la Administración Central aumentó en un promedio del 8.3%, de L 80,016 millones en 2011 a L 177,584 millones en 2021. Este comportamiento se debe al crecimiento promedio de 7.9% de los gastos corrientes, de L 59,692 millones en 2011 a L 127,758 millones en 2021, principalmente debido al crecimiento de 6.2% en el gasto por consumo, de los cuales L 40,611 millones fueron registrados en 2011 y 2021 se registraron L 74,143 millones.
En cuanto, al pago de los intereses de la deuda pública, en 2011 significaba un gasto de L 5,119 millones, sin embargo, para el 2021 representa un crecimiento de 317%, lo que refleja un gasto de L 21,333 millones. Además, las transferencias y donaciones corrientes del gobierno aumentaron en un promedio de 9.8%, de L 9,176 millones en 2011 a L 23,373 millones en 2021.
Asimismo, el gasto de capital de la Administración Central ha reportado un crecimiento promedio de 6.8%, del cual fueron L 15,708 millones en 2011 a L 30,264 millones en 2021. Dentro de ello se encuentra la inversión del gobierno, que únicamente representa un crecimiento promedio de 5.3%, donde en 2011 se invirtieron L 7,293 millones y para el 2021 se invirtieron L 12,232 millones. Y de manera similar, otros gastos de capital aumentaron en un promedio de 25%, que incluye las asignaciones que se otorgan al Congreso Nacional, Ministerio Público y el Poder Judicial, donde en 2011 se registró en L 226 millones y al 2021 se alcanzan alrededor de L 2,128 millones.
Por lo antes expresado, el manejo de los recursos se ha dirigido de una manera en la que la población no se vea beneficiada, y en mayor medida Honduras cierra los años fiscales, representando un déficit, donde en 2011 la Administración Central tuvo un déficit de 4.6% del PIB y para el 2021 cerró con 5.0% del PIB. Lo que nos deja una perspectiva de déficit altos y baja recaudación de ingresos, que difícilmente se corregirá si el gobierno no utiliza alternativas razonables.
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